viernes, enero 23, 2009

MEMORIAS DE UNA CATASTROFE

EL TERREMOTO DEL QUINDÍO, ENERO 25 1999

Estaba en Medellin, almorzando en casa cuando escuché la noticia en la radio, luego, empezaron a hablar de lo fuerte del tramacazo, no dudé un momento en llamar a Nestor, mi hermano para que me contara más al respecto.

La linea del teléfono fijo no funcionaba (ni lo hizo por muchos días más), logré localizarlo en su celular y me dijo que en ese momento estaba parado en el segundo piso del edificio en donde una vez estuvo Torres y Torres, Calle 21 con la Carrera 15
Este, que tal vez sea el relato mas corto lo resume todo:
"Hermano, increible, estoy en medio de una polvareda la hijueputa, esto se chingó"

Se fué la señal de su celular y pude volver a hablar con Nestor 8 dias después.
Mi sobrina Silvia Teresa Linares, médica de profesión y residente en Bogotá vinculada a la organización Médicos Sin Fronteras, se puso en contacto con su gente en Bogotá y Europa y fué asi como la casa de mi mamá en Calarcá, con sus 7 habitaciones, se convirtió en el albergue y centro de trabajo de esta organización por casi 2 meses. Cuando viajé allí, 15 dias después, en medio de la tragedia, pude ver a médicos de varias partes del mundo que adoptaron a Mamá como la suya; y ella? felíz cocinándoles sancocho, sudao, sopa de arroz con carne molida y muchos más platos de su extenso recetario "your momma is great she is our mother now", me decían los "nuevos hijos de mi mámá y a quienes por esos dias que estuve allí, adopté como mis "hermanos"
Reflexioné sobre este lindo detalle y me dije para mi mismo: ahora que no estamos a su lado, no pierde la oportunidad para hacer lo que sabe hacer mejor que ninguna madre en el mundo: ser mamá.


Las fotos que adjunto son fiel reflejo del cambio que ha experimentado la capital Armenia; no obstante todavia queda mucho por hacer.

Créditos de las fotos: Revista Cambio Colombia y Dante en Skyscraper.com



Hasta luego

ivanres49@hotmail.com

1 comentario:

Sylvia dijo...

Quiubo Ivan:

Muy bueno el articulo. No pude ver las fotos, pero de veras que el escrito me remonto a ese dia de Ener 25 del 2001, cuando llamaba y llamaba a mi mama y no me contestaba al telefono (Siempre la llamaba a la hora del almuerzo).

El mismo dia, pasadas las 2 de la tarde, un amigo de la oficina me aviso de un terremoto "en un pueblo remoto de Colombia llamado Armenia". Ahi ya se me paro el pelo de susto y me agarre a llamar a todo el mundo en mi agenda. Nadie contestaba ni en el Quindio ni en Bogota.

Por Silvia Rodriguez me entere que los dos viejos estaban bien, pero que habia varios tios y primos que no encontraban. Ya cuando logre hablar con mi mama, me comento que el temblor los habia cogido en la cocina y que sin saber que estaba pasando, salieron despavoridos para la galeria, en chancletas y con la cacerola en una mano y el maletin (el cual siempre tenia listo, con pasaportes y otros papeles ademas de una muda y sus medicinas) en la otra. Me dijo que se fueron parala galeria porque alli en la plaza de mercado no habia edificios y no tendrian el riezgo de que les cayera algo encima. Estos dos viejitos como siempre pensando mas alla del momento...
Bueno, gracias por estas memorias y por recordarnos las hazañas de la viejita brindando hospitalidad a los medicos sin frontera.
Yo tambien guardo silencio y reflexiono en esos momentos tan duros que deben haber pasado quienes tuvieron esa terrible experiencia.